Bruno Zevi
Los aportes más importantes de Bruno
Zevi (Roma, 1918) a la
arquitectura orgánica son quizás en el terreno teórico.
Según Darío Rodríguez Botero, “comprometido
con los nuevos objetivos e intereses de la arquitectura de la década de los
cincuenta, Zevi asumió el propósito de superar el racionalismo de entreguerras
para abrir camino al organicismo como nuevo y verdadero fundamento de lo
moderno. Fue así como dio peso a su tesis de que la arquitectura moderna era más
resultado de los logros de F.L.
Wrigth y de Alvar Aalto que de Le Corbussier y Walter Gropius.”[1]
Para Zevi, siempre preocupado por las
relaciones entre la arquitectura, la historia y la sociedad, “la arquitectura
orgánica significaba una forma afín a una sociedad democrática, mientras que el
clasicismo se constituía en impedimento para la liberación del hombre”.[2]
En su importante obra teórica se
destacan, Hacia una arquitectura orgánica
(1945), Saber ver la arquitectura
(1948), Arquitectura e historiografía
(1974) e Historia de la arquitectura
moderna(1975). Entre sus obras arquitectónicas cabe recordar la biblioteca
Einaudi, en Dogliani (1962-1963), y el del pabellón italiano de la exposición
de Bruselas (1967).[3]
1. Germán Darío Rodriguez Botero. De la arquitectura
orgánica a la arquitectura del lugar. Punto aparte. Universidad Nacional de
Colombia
2. Ibid
No hay comentarios:
Publicar un comentario